Los colorantes se han usado desde los tiempos más remotos. Desde tiempos remotos se utilizaban diversas materias de origen vegetal y animal, así como de distintos minerales.[cita requerida]
En química, se llama colorante a aquella sustancia capaz de absorber determinadas longitudes de onda del espectro de luz. Son sustancias que se fijan en otras y las dotan de color de manera estable ante factores físicos o químicos como la luz y agentes oxidantes.
Para que un colorante funcione debe tener en su estructura química determinados grupos funcionales, denominados cromóforos, que hacen que la molécula se absorba en la región visible del espectro electromagnético. Un auxocromo (literalmente "aumentar color") consiste en un grupo cargado positivamente que intensifica una sustancia o cromóforo en la síntesis de colorantes.
Primeros colorantes usados por el hombre
Perú Precolombino
Se usaban principalmente tres familias de colores: rojos, azules y amarillos.
Los azules se obtenían al macerar las hojas de plantas índigoferas y también de una papa negra que crece en el altiplano peruano (Solanum sp).
Por otro lado, los amarillos son más difíciles de precisar, ya que son muchos los vegetales comunes que lo producen. Algunos de los más frecuentes son el árbol molle o pimiento (Schinus molle) y el arbusto chilca (Baccharis polyantha). Además, se utilizaban otras plantas como el Nogal, la tara, la raíz de ratania, la cúrcuma, el azafrán, la gualda, etc.[2]
Pueden definirse como una paleta de colores. Por ejemplo, el color dorado anaranjado estaría compuesto por varias mezclas a x proporciones que dan esa tonalidad.