Petorca se caracteriza por su geografía montañosa y la presencia de ríos como el Petorca el cual nace de la unión del río Sobrante y del Pedernal, que históricamente han sido fuentes de agua para el consumo humano y la agricultura.[4]
Historia
Desde la década de 1990, la industria agroexportadora ha crecido significativamente, aumentando la demanda de agua para cultivos que requieren grandes cantidades de este recurso, como la palta.[4][5][6] Esta afirmación es enfáticamente negada por los representantes de la agroindustria del área, cuyos representantes empresariales afirman que el aguacate consume menos agua que otras especies, atribuyendo la escasa disponibilidad hídrica a la «falta de inversión estatal en infraestructura de embalses y riego».[7]
La crisis hídrica ha tenido un impacto devastador en las comunidades de Petorca. Muchas familias han perdido su acceso al agua potable y se ven obligadas a depender de camiones aljibe para abastecerse, lo que representa un costo significativo y una carga adicional en sus vidas.[2] Además, la falta de agua ha afectado la agricultura familiar, que solía ser una fuente de sustento y comercio para los habitantes de la región .[4][2][8]
Desde el año 2006 las precipitaciones en la zona no han alcanzado las de un año normal, afectando los caudales disponibles para el consumo humano y el uso agrícola.[9]
En 2010 surge MODATIMA, una organización dedicada a la defensa del derecho al acceso al agua de los campesinos, trabajadores y habitantes de la provincia de Petorca.
En 2016 durante la gestión del gobernador Mario Fuentes Romero en el segundo gobierno de Michelle Bachelet, la provincia de Petorca fue declarada como zona de escasez hídrica.[16][17][18] Esto permitió disponer un servicio de camiones aljibe para la entrega de agua a la población.[19] Como solución a largo plazo se propuso dirigir agua desde los ríos Aconcagua y Maipo, entre otras medidas.[20][21] [22]
El año 2017 se censaron solo 4763 hectáreas de paltos en la cuenca, una baja del 45% con respecto a 2008. En el año 2018, 4778 personas tuvieron que recibir suministro de agua potable por media de camiones aljibe.[9]
El segundo gobierno de Sebastián Piñera dispuso un control riguroso de los pozos de donde se extrae agua, la formación y empoderamiento de Juntas de Vigilancia entre los agricultores que observen y exijan el cumplimiento de la ley y el gobierno dispuso un presupuesto de US$ 173.000.000 para la construcción del embalse Las Palmas con una capacidad de 55 millones de metros cúbicos que debe entrar en operaciones en 2024.[9]
Otro proyecto, menos avanzado, es el de la construcción del embalse Pedernal de 31 millones de metros cúbicos para el riego de 1800 hectáreas.[23]
↑Wichter, Tom (6 de abril de 2023). «Crisis hídrica en Chile: exportadores de paltas vaciaron un río y dejaron a toda una comuna sin agua». Página 12.|fechaacceso= requiere |url= (ayuda)