Los dos clubes disputaron el partido por primera vez en 1951 y, debido a la proximidad del centro de cada uno hacia el otro —separados por tan solo 50 kilómetros—, la rivalidad fue aumentando.[2] El Derby du Rhône es citado como uno de los encuentros más emocionantes de la temporada de la Ligue 1 y, al igual que otras grandes rivalidades, se extiende fuera del terreno de juego. La rivalidad a nivel local es tradicionalmente vista como un desafío simbólico entre los burgueses de Lyon y la clase trabajadora de Saint-Étienne, ya que la ciudad de Lyon está considerada como una población clásica de cuello blanco y su homólogo de Saint-Étienne es vista por los lugareños como más cuello azul.[1]
El derbi también enfrenta al club francés de más éxito reciente (Lyon) contra el club con más títulos de liga de Francia (Saint-Étienne). Durante el siglo XX, el Saint-Étienne fue el club más exitoso del fútbol francés al ganar diez títulos de liga entre 1957-1981, un récord que sigue sin ser superado actualmente. Durante ese lapso, el club también ganó seis títulos de Copa de Francia y buenas actuaciones a nivel europeo.[1] Sin embargo, tras el descenso del club a la segunda división en 1984, el dominio del Saint-Étienne en la escena del fútbol en Francia comenzó a disminuir. Por su parte, el Lyon comenzó un ascenso similar en el fútbol francés en el comienzo del nuevo milenio, cuando el club ganó su primer campeonato de Ligue 1 en 2002. El título inicial comenzó un récord nacional de siete títulos consecutivos, una racha sin igual en la historia del fútbol francés. El mejor resultado del Lyon en ese periodo fue llegar a las semifinales de la Liga de Campeones de la UEFA.
Debido a la rivalidad de los clubes, algunos jugadores han jugado tanto para el Lyon como el Saint-Étienne. Puesto que los dos clubes se enfrentaron entre sí por primera vez en 1951, solo 27 jugadores han jugado para ambos y solo 13 jugadores se han transferido directamente desde el Lyon al Saint-Étienne y viceversa. El primer jugador traspasado entre ambos equipos fue Antoine Rodriguez en 1951, cuando después de haber jugado nueve años en el Saint-Étienne, se trasladó a Lyon, donde pasó solo una temporada. Otros jugadores notables que hicieron el mismo camino fueron Aimé Jacquet que, después de haber tenido una exitosa carrera de 13 años con el Saint-Étienne, abandonó el club por el Lyon, donde pasó tres temporadas. Jacquet más tarde pasó a entrenar el Lyon y llevó al equipo a la final de la Copa de Francia 1973. Del mismo modo, el delantero Bernard Lacombe se estableció como uno de los goleadores de todos los tiempos principales de Lyon antes de abandonar el club para fichar por el Saint-Étienne en 1978, donde fue abucheado en repetidas ocasiones, lo que llevó al jugador a salir del club y firmar por el Girondins de Burdeos tras una sola temporada. Otros jugadores que fueron transferidos directamente entre los dos clubes son François Lemasson, Alain Moizan, Andre Calligaris, Romarin Billong, Jean-Luc Sassus, Christopher Deguerville, Grégory Coupet, Franck Priou, Lamine Diatta y Bafétimbi Gomis.