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Maurizia Aldeiturriaga
Maurizia Aldeiturriaga Zabala (Ceberio, España; 22 de septiembre de 1904-19 de mayo de 1988) fue una panderetera vizcaína.[1][2] BiografíaMaurizia con 12 años comenzó a tocar la pandereta en las plazas con Joakin Goti, natural de Zeberio. Conoció a Benantzio Bernaola (Karakol) a los 17 años tocando la pandereta y cantando canciones antiguas. A Maurizia le gustó la forma viva de interpretar a Benantzio y sugirió que comenzaran a tocar. Inicialmente, un dúo musical, más tarde también se convirtió en esposo. Cuando se casaron mantuvieron el mismo estilo de vida, tocando música en los días festivos y trabajando duro el resto del día: Maurizia en la granja y su esposo en la fábrica. Durante la guerra civil se interrumpió la actividad musical, Benantzio fue encarcelado durante tres años, y se mantuvo la pandereta y el acordeón. Con el paso de los años empezaron a tocar de nuevo. Más tarde, Leon Bilbao formó un trío con el compañero del pueblo. Benantzio, que padecía una enfermedad cardíaca, se quedó en casa y fue reemplazado por trikitilari Fasio Arandia. A partir de 1964, los tres tocaron juntos durante veinte años. Tras la muerte de Fasio, el acordeonista, pandero y trikitilari Basilio Undagoitia continuó con Maurizia y Leon.[3] RepresentacionesSolía quemar algunas páginas del periódico antes de la actuación, con cuyo calor poner a punto la piel de la pandereta. Su forma enérgica de cantar fue la característica principal de la música de Maurizia. La voz de Maurizia era salvaje, primitiva y, sobre todo; poderosa. Siempre usaba ropa tradicional para ir a cualquier parte, así como para grabar en el estudio. Así lo recuerdan tanto Juan Mari Beltrán como Ruper Ordorika en los días en que grababa con ellos. También cautivó a los jóvenes de la nueva generación de músicos. Para Josu Zabala de Hertzainak o Fermin Muguruza de Kortatu, la forma libre de cantar de Maurizia se convirtió en un modelo.[4] Discografía
Referencias
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