Share to: share facebook share twitter share wa share telegram print page

Monismo

Reciben el nombre de monismo las posturas filosóficas que sostienen que el universo está constituido por una única sustancia (arché), causa o sustancia primaria.

Según los monismos materialistas, todo se reduce, en última instancia, a materia, mientras que para los espiritualistas o idealistas (especialmente el idealismo hegeliano), ese principio único sería el espíritu, y para los panteístas sería Dios mismo. En cambio para doctrinas no dualistas, como la advaita, que afirma la unidad entre las almas (atman) y la divinidad (Brahman), postula que la conciencia cósmica en la que existe esta unidad sería el "verdadero sustrato" de todo.

Para los antiguos filósofos hindúes, lo observado por los sentidos y las relaciones de causalidad son una ilusión; solo hay una realidad: Brahman.[1]​ Por tanto, Brahman será esa causa primera que explica el resto del universo. Para los filósofos monistas materialistas contemporáneos, la materia formada en la Gran Explosión dio lugar al universo y solo esta materia explica la realidad.

Filósofos monistas son Tales de Mileto, Parménides, Anaximandro, Anaxímenes, Spinoza, Berkeley, Hume y Marx.

El monismo neutral es una teoría filosófica que predica que la sustancia básica no es ni física ni mental, sino que puede ser reducida a materia neutra cuya naturaleza no sería ni física ni mental. El monismo neutro fue introducido en el siglo XVII por el filósofo judío neerlandés Efra. En la actualidad una versión de esta teoría ha sido desarrollada por el filósofo estadounidense Donald Davidson.

El materialismo tradicional, una variedad del monismo, considera que la sustancia primaria es material y física.

El idealismo es una forma de monismo filosófico que sostiene que el principio básico del universo es espiritual.

Explicaciones monistas

Los planteamientos monistas, al contrario que los dualistas, consideran que el ser humano es una única realidad, que es unitario, negando así la existencia de la mente como realidad distinta del cerebro.

El monismo materialista

Demócrito (cuyo principio constitutivo del universo, o arjé, era el átomo) sostenía que toda realidad es un compuesto material fruto de la unión de átomos, y explicaba que tanto lo que es como lo que no es, lo sólido y lo vacío, existen igualmente y uno dependiendo del otro. El ser humano es puramente materia, y por tanto no existe inmortalidad del alma. El materialismo de Demócrito se fortalece a lo largo de los siglos XVII al XIX y XX, a través de filósofos como D´Holbach, Diderot y La Mettrie, que escribió El Hombre Máquina. Para él, el alma es una parte material del cuerpo identificada con el cerebro. Así, somos máquinas muy complejas que no necesitan dirección externa (alma) para realizar sus funciones. El materialismo mecanicista de La Mettrie fue sustituido en el siglo XIX por el materialismo dialéctico de Marx. Dentro del monismo materialista, se distinguen varias posturas como el conductismo y el reduccionismo fisicalista.

El monismo espiritualista

Opuesto al anterior, afirma que todo lo que existe es percepción. En palabras de Berkeley, “esse est percipi” (ser es ser percibido), es decir, la realidad consiste en percibir o ser percibido. Así que no tiene sentido afirmar la independencia de cuerpo o materia, puesto que todo es percepción.

Como ejemplo particular se puede tomar el monismo idealista hegeliano que, partiendo de la historicidad del ser, sostiene en que el ser de la realidad objetiva es el no-ser: solo existe de manera ideal (en el sentido de que solo existe en la idea) y es esta la realidad. A su vez, la tensión permanente entre el ser y el no-ser (en este caso entre lo ideal y lo real) es lo que da pie al desarrollo dialéctico del espíritu humano (en el sentido alemán del concepto).

Una aplicación concreta del análisis de la dialéctica idealista es el caso del desarrollo histórico del lenguaje, como unidad de la lengua y el habla. Aquí se observa que la lengua es ideal y general, mientras que el habla, su práctica, es completamente particular; es más: el habla es un conjunto de realizaciones concretas de su idealidad. Sin embargo, la tensión entre la lengua y el habla, como ejemplo del ser y no-ser, lleva a su desarrollo histórico y transformación de tanto de la idealidad de la lengua como de la práctica del habla. Siguiendo este patrón es que podemos entender la transformación del latín a cada una de las lenguas romances.

El monismo intermedio

Spinoza (1632-1677) propone una solución neutral. Spinoza no admite el dualismo cartesiano de las dos sustancias (material y espiritual). Para él, estamos compuestos por una sola sustancia que es Dios, de la cual solo conocemos dos atributos: la extensión y el pensamiento. Son dos atributos de la misma realidad, de modo que el monismo intermedio considera que hay una única sustancia de la cual solo conocemos dos atributos. Entonces cuerpo y mente son dos aspectos de una misma cosa y, por eso, ya no es necesario plantear el problema de su interacción.

Evolución del término

Como refiere Max Kistler, probar la existencia de la mente es un desafío para el monismo. El dualismo más potente ha sido el cartesiano, que no ha sido lo suficientemente salvado y ha llevado a postular sustancias independientes entre sí ya sean cuerpos sin mente (res extensa) como mentes sin cuerpos (res cogitans).[2]

Las formas extremas de monismo han derivado en el conductismo lógico y la teoría de la identidad psicofísica, ambas rechazadas.[cita requerida] La primera planteando que formas superiores del comportamiento (v. gr. el lenguaje) no son reductibles a un comportamiento.[cita requerida] La segunda, interponiendo el argumento de que no contempla el carácter cualitativo de la experiencia y de la conciencia,[cita requerida] términos que hoy en día son muy afines.[cita requerida]

El debate actual se ha desplazado a probar no ya la sustancia pensante, sino las propiedades mentales.

Otra forma de monismo extremo, el eliminativismo, intenta probar que no existen propiedades mentales. El monismo anómalo de Donald Davidson sostiene que cada estado mental es idéntico a un estado físico. El epifenomenismo tiene a las propiedades mentales como superveniencia de las propiedades físcas subyacentes.

Finalmente, la posición más en boga es, según Kistler,[2]​ el funcionalismo: suerte de dualismo entre las propiedades mentales y las físicas.

Historia

El término monismo fue introducido en el siglo XVIII por Christian von Wolff[3]​ en su obra Lógica (1728), para designar tipos de pensamiento filosófico en los que se intentó eliminar la dicotomía de cuerpo y mente y explicar todos los fenómenos por un principio unificador, o como manifestaciones de una sola sustancia.[3]

El problema mente-cuerpo en filosofía examina la relación entre la mente y la materia, y en particular la relación entre la conciencia y el cerebro. El problema fue abordado por René Descartes en el siglo XVII, resultando en el dualismo cartesiano, y por los filósofos pre-aristotélicos,[4][5]​ en Avicena,[6]​ y en tradiciones asiáticas anteriores y más específicamente indias.

Más tarde también se aplicó a la teoría de la identidad absoluta expuesta por Hegel y Schelling.[7]​ A partir de entonces, el término se usó de manera más amplia para referirse a cualquier teoría que postulara un principio unificador.[7]​ La tesis opositora del dualismo también se amplió, para incluir el pluralismo.[7]​ Según Urmson, como resultado de este uso extendido, el término es "sistemáticamente ambiguo".[7]

Según Jonathan Schaffer, el monismo perdió popularidad debido al surgimiento de la filosofía analítica a principios del siglo XX, que se rebeló contra los neohegelianos. Rudolf Carnap y A. J. Ayer, quienes eran fuertes defensores del positivismo, "ridiculizaron toda la cuestión como misticismo incoherente".[8]

El problema mente-cuerpo ha resurgido en la psicología social y campos relacionados, con el interés en la interacción mente-cuerpo[9]​ y el rechazo del dualismo cartesiano mente-cuerpo en la tesis de identidad, una forma moderna de monismo.[10]​ El monismo también sigue siendo relevante para la filosofía de la mente,[7]​ donde se defienden diversas posiciones.[11][12]

Véase también

Notas

  1. La doctrina vedántica de que el mundo es "del material del arte" (mâyâ-maya) no es una doctrina de la "ilusión", sino que distingue meramente entre la realidad relativa del artefacto y la realidad mayor del Artífice en quien subsiste el paradigma.
  2. a b Olivier Houdé, Daniel Kayser, Olivier Kœnig, Joëlle Proust, Francois Rastier, Diccionario de ciencias cognitivas, trad. Carlo Rodolfo Molinari Marotto, Amorrortu editores, Buenos Aires, 2003. ISBN 950 518 901 X
  3. a b "monism", Columbia Electronic Encyclopedia, 6th ed. Retrieved 29 October 2014.
  4. Robert M. Young (1996). «The mind-body problem». En Olby, RC; GN Cantor; JR Christie et al., eds. Companion to the History of Modern Science (Paperback reprint of Routledge 1990 edición). Taylor & Francis. pp. 702-11. ISBN 0-41514578-3. 
  5. Robinson, Howard (3 de noviembre de 2011). «Dualism». En Edward N. Zalta, ed. The Stanford Encyclopedia of Philosophy (Winter 2011 Edition). 
  6. Henrik Lagerlund (2010). «Introduction». En Henrik Lagerlund, ed. Forming the Mind: Essays on the Internal Senses and the Mind/Body Problem from Avicenna to the Medical Enlightenment (Paperback reprint of 2007 edición). Springer Science+Business Media. p. 3. ISBN 978-9048175307. 
  7. a b c d e Urmson, 1991, p. 297.
  8. Schaffer, 2010.
  9. Fiske, Gilbert y Lindzey, 2010, p. 195.
  10. Fiske, Gilbert y Lindzey, 2010, p. 195-196.
  11. Mandik, 2010.
  12. McLaughlin, Beckermann y Walter, 2009.

Fuentes

  • Abernethy, George L; Langford, Thomas A. (1970), Introduction to Western Philosophy:Pre-Socratics to Mill, Belmont, CA: Dickenson .
  • Brugger, Walter, ed. (1972), Diccionario de Filosofía, Barcelona: Herder, art. dualismo, monismo, pluralismo .
  • Buswell, Robert E. Jr.; Gimello, Robert M., eds. (1994), Paths to Liberation. The Marga and its Transformations in Buddhist Thought, Delhi: Motilal Banarsidass Publishers .
  • Chande, M.B. (2000), Indian Philosophy In Modern Times, Atlantic Publishers & Dist .
  • Cross, F.L.; Livingstone, E.A. (1974), «monism», The Oxford Dictionary of the Christian Church, OUP .
  • Dasgupta, Surendranath (1992), A history of Indian philosophy part 1, Motilall Banarsidass .
  • Dense, Christian D. Von (1999), Philosophers and Religious Leaders, Greenwood Publishing Group .
  • Fiske, Susan T.; Gilbert, Daniel T.; Lindzey, Gardner (2010), Handbook of Social Psychology 1, John Wiley & Sons .
  • Flood, Gavin (1996), An Introduction to Hinduism, Cambridge University Press, ISBN 0-521-43878-0, (requiere registro) .
  • Fowler, Jeaneane D. (2002), Perspectives of Reality: An Introduction to the Philosophy of Hinduism, Sussex Academic Press .
  • Hawley, michael (2006), Sarvepalli Radhakrishnan (1888—1975) .
  • Hori, Victor Sogen (1999), Translating the Zen Phrase Book. In: Nanzan Bulletin 23 (1999) .
  • Kalupahana, David J. (1992), The Principles of Buddhist Psychology, Delhi: ri Satguru Publications .
  • ——— (1994), A history of Buddhist philosophy, Delhi: Motilal Banarsidass Publ. .
  • Kasulis, Thomas P. (2003), «Ch'an Spirituality», en Takeuchi Yoshinori, ed., Buddhist Spirituality. Later China, Korea, Japan and the Modern World (Delhi: Motilal Banarsidass) .
  • Liang-Chieh (1986), The Record of Tung-shan, William F. Powell transl., Kuroda Institute .
  • Low, Albert (2006), Hakuin on Kensho. The Four Ways of Knowing, Boston & London: Shambhala .
  • Maezumi, Taizan; Glassman, Bernie (2007), The Hazy Moon of Enlightenment, Wisdom Publ .
  • Mandik, Pete (2010), Key Terms in Philosophy of Mind, Continuum International Publish. .
  • McLaughlin, Brian; Beckermann, Ansgar; Walter, Sven (2009), The Oxford Handbook of Philosophy of Mind, Oxford University Press .
  • Michaels, Axel (2004), Hinduism. Past and present, Princeton, New Jersey: Princeton University Press .
  • Momen, Moojan (2009) [Originally published as The Phenomenon of Religion in 1999], Understanding Religion: A Thematic Approach, Oxford, UK: Oneworld Publications, ISBN 978-1-85168-599-8, OL 25434252M .
  • Nakamura, Hajime (1991), Ways of Thinking of Eastern Peoples: India, China, Tibet, Japan, Delhi: Motilal Banarsidass Publishers Private Limited, hdl:10125/23054 .
  • Puligandla, Ramakrishna (1997), Fundamentals of Indian Philosophy, New Delhi: D.K. Printworld (P) Ltd. .
  • Radhakrishnan, Sarvepalli; Moore, Charles A. (1957), A Sourcebook in Indian Philosophy (12th Princeton Paperback edición), Princeton University Press, ISBN 0-691-01958-4 .
  • Rambachan, Anatanand (1994), The Limits of Scripture: Vivekananda's Reinterpretation of the Vedas, University of Hawaii Press .
  • Renard, Philip (1999), Ramana Upanishad, Utrecht: Servire .
  • Schaffer, Jonathan (2010), «Monism: The Priority of the Whole», Philosophical Review 119 (1): 31-76), doi:10.1215/00318108-2009-025 .
  • Sehgal, Sunil (1999), Encyclopaedia of Hinduism: T-Z, Volume 5, Sarup & Sons .
  • Sharf, Robert H. (1995), «Buddhist Modernism and the Rhetoric of Meditative Experience», NUMEN 42 (3): 228-283, doi:10.1163/1568527952598549, hdl:2027.42/43810, archivado desde el original el 12 de abril de 2019, consultado el 10 de febrero de 2013 .
  • Urmson, James Opie (1991), The Concise Encyclopedia of Western Philosophy and Philosophers, Routledge .
  • White, David Gordon, ed. (2000), Introduction. In: Tantra in practice, Princeton and Oxford: Princeton University Press .
  • Williams, Paul (1994), Mahayana Buddhism, Routledge, ISBN 0-415-02537-0 .

Bibliografía adicional

  • Baruch Spinoza, Traité de la réforme de l'entendement (1677), tr. fr. C. Appuhn, Paris, Flammarion, 1964. (en francés)
  • Baruch Spinoza, Éthique (1677), II, tr. fr. B. Pautrat, Paris, Seuil, 1999. (en francés)
  • Gottfried Wilhelm Leibniz, La monadologie (1714), dans Les classiques des sciences sociales (bibliothèque numérique). Texte en ligne (formats .doc, .pdf et .rtf) . (en francés)
  • Alain Lacroix, Hegel – La philosophie de la nature, Paris, PUF, 1997. (en francés)
  • Ernst Haeckel, Le monisme, lien entre la religion et la science – Profession de foi d'un naturaliste (1892), traduction et préface de G. Vacher de Lapouge, Paris, Schleicher, 1987. (en francés)
  • William James, A Pluralistic Universe, Londres, Longmans, Green & Co., 1909. (en inglés)
  • Désiré Nys, « Le monisme », Revue néo-scolastique de philosophie, vol. 19, n° 76 Louvain, Société philosophique de Louvain, 1912, p. 515-536. Texto en línea (en francés)
  • Ullin Thomas Place, « Is Consciousness a Brain Process? » (1956), British Journal of Psychology, 47, p. 44–50. (en inglés)
  • Paul Oppenheim & Hilary Putnam, « The unity of science as a working hypothesis » (1958), tr. fr. « L'unité des sciences : une hypothèse de travail » in P. Jacob, De Vienne à Cambridge, Paris Gallimard, 1980, p. 371–416. (en francés)
  • Herbert Feigl, Le « mental » et le « physique » (1958), Paris, L'Harmattan, 2002. (en francés)
  • David Kellogg Lewis, « An Argument for the Identity Theory » (1966), Journal of Philosophy, 63, p. 17–25. (en francés)
  • David Malet Armstrong, A materialist theory of the mind, Londres, Routledge & Kegan, 1968.(en inglés)
  • John J. C. Smart, « The Mind/Brain Identity Theory » (2000), in Stanford Encyclopedia of philosophy Artículo en línea. (en inglés)
  • Patrick Tort, La pensée hiérarchique et l'évolution, Paris, Aubier, 1983, p. 268–328 (en francés)

Enlaces externos

Kembali kehalaman sebelumnya