Patricia Cowings
Patricia Cowings (El Bronx, 15 de diciembre de 1948) es una psicofisióloga estadounidense. Fue la primera mujer americana formada por la NASA como astronauta científica.[1] Aunque fue suplente para un vuelo espacial en 1979, no viajó al espacio.[2] Es más conocida por sus estudios sobre la fisiología de los astronautas en el espacio exterior, así como por ayudar a encontrar curas para el mareo de los astronautas.[3][4] TrayectoriaCowings nació y creció en el Bronx, Nueva York, el 15 de diciembre de 1948. Es hija única de Sadie B. y Albert S. Cowings. Sadie era ayudante de maestra de preescolar y Albert era dueño de una tienda de comestibles. Ella tuvo otros tres hermanos que llegaron a ser general con dos estrellas del ejército, músico de jazz y periodista independiente. Sus padres hicieron hincapié en la educación como “forma de salir del Bronx”.[5] Patricia encontró su amor por la ciencia a muy temprana edad. Patricia participaba en la danza africana y step y en 1970 se licenció en Artes por la Universidad Estatal de Nueva York.[6] Cursar una asignatura de ingeniería en la que participó en el diseño de un trasbordador espacial, le ayudó a lanzar su deseo de trabajar en el campo de la tecnología espacial.[7] Realizó la mayor parte de sus investigaciones en el Centro de Investigación Ames de la NASA. Allí desarrolló y patentó un sistema de entrenamiento fisiológico llamado Autogenic-Feedback Training Exercise (AFTE), que permite a las personas aprender el autocontrol voluntario de hasta 24 respuestas corporales en seis horas.[8] Su trabajo se probó por primera vez en 1985 para (STS 51-b & STS 51c) Spacelab-3 y la primera misión del transbordador del Departamento de Defensa. También probó su método AFTE en la misión Space J-Lab (la primera misión de un transbordador japonés) con su trabajo enfocándose en eliminar el mareo de los astronautas.[1][3] Más tarde entrenó a cuatro cosmonautas para controlar tanto el mareo como la presión arterial baja tras seis meses en el espacio a bordo de la estación espacial MIR. Sus métodos de biorretroalimentación tuvieron éxito y siguió enseñando a controlar el mareo, a mejorar el rendimiento de pilotos de búsqueda y rescate y a reducir los síntomas de varios grupos de pacientes con náuseas, mareos y desmayos. Ha colaborado en la autoría de diferentes publicaciones con su marido, el Dr. William B. Toscano. Tienen un hijo, Christopher Michael Cowings Toscano, que viajó con ellos mientras entrenaban a tripulaciones espaciales. En la actualidad continúa su trabajo ayudando a prevenir el mareo de los astronautas en el espacio, además de controlar el mareo cuando regresan a casa.[7] Es la investigadora principal de los laboratorios de Investigación Psicofisiológica del Centro de Investigación Ames de la NASA y ha sido profesora adjunta de Psiquiatría en UCLA y de psicología médica y clínica en la Universidad de Servicios Uniformados (ARC).[1] PremiosGracias a su investigación y docencia ha podido conseguir varios premios, entre ellos:[9]
Referencias
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