Patrimonio naturalEl patrimonio natural está constituido por monumentos naturales construidos por formaciones físicas y biológicas, es decir, estas fueron creadas a lo largo del tiempo por la naturaleza, teniendo un valor universal excepcional desde el punto de vista estético y científico además de cultural. El patrimonio natural lo constituyen las reservas de la biosfera, los monumentos naturales, las reservas y parques nacionales, y los santuarios de la naturaleza, que nos ha legado el pasado.[1] Las formaciones geológicas o fisiográficas y las zonas estrictamente delimitadas constituyendo el hábitat de especies de animales y vegetales amenazados de desaparición tienen un valor desde el punto de vista de la ciencia o de la conservación de las mismas y conservación del ambiente. Teniendo como resumen todos los animales, plantas, territorios y conjuntos de estos tres grupos hacen que signifiquen valores universales en cuanto a la protección y conservación de especies animales y vegetales en peligro de desaparición o paisajes integrales en peligro de destrucción o transformación son en términos generales un patrimonio natural cuya custodia en la conservación o en su caso multiplicación es responsabilidad de una nación ya que dicho patrimonio debe de permanecer igual en su raíz biológica donde se encuentre como un pueblo o una ciudad y por lo tanto debe seguir perteneciéndole evitando su desaparición de manera que se mantenga para las generaciones futuras. Incluye obras arquitectónicas y ambientes naturales excepcionales. Las construcciones humanas deben ser representativas de una cultura para considerarse patrimonio, sea cual sea el momento de su creación. Algunos patrimonialistas y museólogos que estudian los vínculos del patrimonio cultural con la naturaleza han alertado sobre las consecuencias concretas de las alteraciones ambientales tanto en la música folklórica[2] como en la producción de artesanías tradicionales y en la supervivencia de las creencias, mitos y leyendas de los pueblos originarios.[3] Sostienen que la destrucción del patrimonio natural, en definitiva, atenta contra la identidad de los pueblos.[4] Por paísesUnión EuropeaEspañaVéanse también: Plan de Ordenación de los Recursos Naturales y Fondo de Restauración Ecológica y Resiliencia.
En España, se encuentra regulado por la Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad.[5] Entre los instrumentos para el conocimiento y planificación del patrimonio natural y de la biodiversidad, incluye:.[6]
En la catalogación, conservación y restauración de hábitats y espacios de patrimonio natural, incluye:
En relación con el uso sostenible del patrimonio natural y de la biodiversidad:
Asimismo, también se ocupa del Fondo de restauración ecológica y resiliencia (FRER) (FCOJ). Véase también
Referencias
Enlaces externos |