La zona ha estado habitada desde hace unos siete mil años por el hombre.[2] Fundada en 1234 con la construcción del burgo,[2] la ciudad antigua forma una península que se extiende a lo largo de la orilla norte del lago. Durante los últimos años, el comercio de la localidad se ha trasladado a zonas del exterior. En el verano Saint-Prex sirve de puerto a los barcos de la Compagnie Générale de Navigation sur le lac Léman (CGN).
En 1973, Saint-Prex recibió el Premio Wakker por el desarrollo y la preservación de su patrimonio arquitectónico.