Vadim Glowna (26 de septiembre de 1941 - 24 de enero de 2012) fue un actor, director, guionista y productor cinematográfico y televisivo alemán.
Biografía
Nacido en Eutin, Alemania nazi, Glowna se crio en Hamburgo tras la separación de sus padres. Su apellido Glowna, polaco, procede de su padrastro, que primero trabajó como capitán de barco y en la posguerra como piloto de Lufthansa.[1] Interrumpió estudios de teología y trabajó como marino, botones, músico de batería, taxista y periodista, hasta que finalmente decidió asistir a una escuela de teatro. Consiguió trabajar en la temporada 1962/63 con un papel en el cuento de hadas Es war einmal representado en el Hamburger Schauspielhaus. Glowna fue entonces descubierto por el director teatral Kurt Hübner, que lo promovió al Theater am Goetheplatz de Bremen.[2] En la temporada 1972/73 actuó de nuevo en Hamburgo en tres producciones bajo la dirección de Claus Peymann, Niels-Peter Rudolph y Dieter Giesing.
Desde mediados de los años 1960 Glowna trabajó en más de 160 producciones cinematográficas y televisivas, con artistas de la talla de Romy Schneider y Claude Chabrol. Su debut como director tuvo lugar en 1981 con la película Desperado City, por la cual fue premiado en el Festival de Cannes de ese año.
En 1980 Glowna fundó junto a Vera Tschechowa, con la que estaba entonces casado, la productora Atossa-Film. La pareja se había casado en 1967 y se divorciaron en 1991. Vivieron muchos años en Múnich, y Glowna adoptó al hijo de Tschechowa, el compositor cinematográfico Nikolaus Glowna.[3] En el año 2000 fue nombrado profesor de dirección de la Academia de Bellas Artes de Düsseldorf. Más adelante se mudó a vivir a Berlín.
En noviembre de 2006 se estrenó el primer largometraje dirigido por Glowna en los últimos 14 años, Das Haus der schlafenden Schönen, basado en el libro Die schlafenden Schönen, de Yasunari Kawabata. El proyecto fue inspirado por su amigo, el escritor Bodo Kirchhoff. Glowna escribió el guion, dirigió y produjo el film, e interpretó el papel principal. En la cinta actuaban también Maximilian Schell y Angela Winkler.
En septiembre de 2006 Ullstein Verlag publicó Der Geschichtenerzähler – Erinnerungen, las memorias de Glowna. Una de las últimas actuaciones del cineasta tuvo lugar en el telefilm Bloch: Der Fremde, que se emitió el 20 de junio de 2012 en la cadena Das Erste.
Vadim Glowna falleció en enero de 2012, a los 70 años de edad, en Berlín, a causa de una diabetes mellitus. Fue enterrado en el Cementerio Waldfriedhof Heerstraße de Berlín (Grab-Nr. 8D).[4][5]