Cuenta con una superficie de 40 580 km² y una población según el censo de 2017 por el INE, de 757 586 habs.[3] La región está compuesta por las provincias de Elqui, Limarí y Choapa. Sus principales centros urbanos son la conurbación La Serena-Coquimbo con 506 391 habitantes, seguida de Ovalle con 121 269 habitantes según el censo chileno de 2017.
Es la región más castigada por la crisis hídrica por el cambio climático. El gobierno de Chile considera como zona de catástrofe por la gran megasequía.
Historia
A partir del siglo III, la zona fue poblada por los indígenas Molle, Ánimas y Diaguita, que establecieron diversos asentamientos en los valles, de la cordillera a mar, y que eran fundamentalmente agricultores. A lo largo de la costa, se estableció un pueblo nómade, que posteriormente fue denominado chango o camanchaco, dedicado a la pesca.
La región tiene su génesis en el huamani o sichi de Coquimbo.[7] Hacia finales del siglo XV la zona fue incorporada al Imperio incaico, que sometió y dejó bajo su dominación a los diaguitas. El gobernador incaico en la zona se estableció en el valle de Coquimbo, desde donde administraba las actividades de la región. Los límites de este territorio político abarcaban desde el valle de Copiapó hasta el del Limarí, teniendo como provincias contiguas al huamani de Collao por el norte y el de Chile por el sur. Desde esa época el valle y la región se comenzaron a llamar «Coquimbo», probablemente del quechua qulqi, 'plata', y tanpu, 'tambo'[8][9] (véase Anien).[10][11]
La región fue explorada por los españoles al mando de Diego de Almagro, en 1536 (Descubrimiento de Chile), pero sus pobladores se habrían manifestado hostiles a su presencia. Almagro al entrar al valle de Coquimbo ajusticia a 30 jefes nativos de pueblos cercanos, entre ellos al gobernador inca local, en represalia por la muerte de tres de sus hombres. De esta manera, y junto a la destrucción del imperio inca a manos de los europeos, se diluye la importancia política incaica en el valle. Como parte de la expedición de Almagro, Los Vilos fue utilizada como improvisado puerto de desembarco de provisiones por un pequeño navío, llamado San Pedro, al mando de Alonso de Quintero.
Producto de la distancia y peligros del viaje entre Santiago y Lima, Pedro de Valdivia ordenó a Juan Bohón fundar La Serena en 1543 o 1544, ubicada a aproximadamente 475 km al norte de Santiago. En 1549, la ciudad de La Serena, fue incendiada y destruida por indígenas; sin embargo, fue refundada el mismo año por Francisco de Aguirre. Luego de la consolidación de la ciudad, este territorio fue organizado por los españoles como el corregimiento de Coquimbo, mudándose así su cabecera política, desde el valle de Coquimbo a la ciudad de La Serena —también llamada durante la época colonial y parte del siglo XIX como ciudad de Coquimbo—,[12][13][14][15][16][17] Los límites del corregimiento fueron similares a los de la época de dominio incaico:[7] Atacama por el norte, anexando esta vez el Choapa por el sur.
A fines del siglo XVI, debido a la disminución de la población nativa, fueron trasladados cientos de mapuche al "valle de Coquimbo" y La Serena.[18] Esta acción tenía como finalidad exiliar y disolver a los grupos que se resistían a ser conquistados en la Guerra de Arauco y suplir la escasez de mano de obra en las haciendas y minas en el Corregimiento de La Serena.
Como división político-administrativa republicana, la Región de Coquimbo tiene su origen en la Intendencia de Coquimbo, creada el 23 de septiembre de 1811, por el Primer Congreso Nacional, que se sumó a las ya existentes en la época colonial: las provincias o intendencias de Santiago y de Concepción, convirtiéndose en una de las tres regiones que conformaron en un inicio el Chile en proceso de independencia.
El 30 de agosto de 1826,[19] mediante las leyes federales se crea la provincia de Coquimbo a partir de la antigua Intendencia de Coquimbo, junto con otras 7 provincias (Aconcagua, Santiago, Colchagua, Maule, Concepción, Valdivia y Chiloé).
En la Constitución de 1828, se mantuvo la división de Chile en ocho provincias. En 1843,[19] se creó la provincia de Atacama, a partir de la segregación de la parte norte de la provincia de Coquimbo. En los años posteriores, se crearon nuevos departamentos.
Con el Decreto de Creación de Municipalidades de 1891, se dividen los departamentos en nuevas municipalidades. En 1927, mediante el decreto con fuerza de ley (DFL) 8582 del 30 de diciembre de dicho año, se reestructura la provincia y con el DFL 8583 se crean las comunas-subdelegaciones.
La región de Coquimbo, que tiene por capital a la ciudad de La Serena, para efectos del gobierno y administración interior, se divide en tres provincias.
La Región de Coquimbo es llamada «zona de los valles transversales». Presenta tres rasgos de relieve: La cordillera de los Andes, el complejo montañoso andino costero y las planicies litorales. Tiene la zona más estrecha de todo el territorio chileno: su ancho mínimo es de 90 km en la latitud 31°37′ S, cerca de la ciudad de Illapel.
Cordillera de los Andes
Se presenta con altas cumbres, sobre los 6000 m s. n. m., aunque continúa descendiendo de norte a sur. Al igual que la Región de Atacama, no presenta volcanismo activo.
Depresión Intermedia
Se encuentra atravesada por una serie de cordones montañosos, situados en sentido este-oeste, que nacen en la cordillera de los Andes y desaparecen en la cordillera de la Costa; este tipo de relieve se ha denominado «complejo montañoso andinocostero». Esta zona, por dicho peculiar relieve, fue llamada por Benjamín Subercaseaux «el país de la senda interrumpida».
Los valles (Elqui, Limarí y Choapa) que han creado tales cordones, conocidos como «valles transversales», cruzan una serie de ríos, muy importantes para la economía agrícola de la zona. Tales valles se encuentran definidos por tres hoyas o cuencas hidrográficas, que corresponden a los ríos Elqui (formado por los ríos Turbio, Claro y Cochiguaz), Limarí (formado por los ríos Hurtado, Grande, Los Molles y Cogotí) y Choapa (formado por los ríos Cuncumén, Illapel y Chalinga), que desembocan en el mar.
El agua transportada por estos ríos provienen del derretimiento de las nieves depositadas en la Cordillera de Los Andes y de las lluvias experimentadas durante el año, por lo que sus caudales son en general irregulares y, en algunos años, bastante escaso, producto de las sequías cíclicas que experimenta la región. Ello ha hecho necesaria la construcción de embalses para su acopio, como el Puclaro (en el río Elqui), Cogotí (en el río Cogotí), Recoleta (en el río Hurtado) y La Paloma (en el río Grande).
El clima de la Región de Coquimbo es de tipo estepárico, con una vegetación arbustiva y con predominio de espinos. Las precipitaciones se concentran preferentemente durante el invierno.
En el litoral se origina una estepa con nublados abundantes. Las temperaturas a lo largo del año son moderadas, producto de la influencia del océano. En la cordillera de la Costa se presenta frecuentemente una neblina costera (llamada camanchaca) que ha permitido, en algunos sectores, el desarrollo de especies vegetales propias del bosque valdiviano: Fray Jorge y Talinay.
En el interior impera un clima de estepa cálida, caracterizado por la sequedad atmosférica, que propicia unos "cielos limpios" (acentuada transparencia del aire), con más de 330 noches despejadas. La astronomía los ha elogiado como uno de los más adecuados del Hemisferio Sur, lo que ha permitido la instalación de importantes observatorios astronómicos, como La Silla y El Tololo.
En la zona cordillerana (cordillera de los Andes) existe un clima estepario frío de montaña, que se destaca por su extrema sequedad atmosférica. Sin embargo, durante las noches se presenta el fenómeno denominado «rocío» (condensación del vapor de agua contenida en el aire, que luego se deposita en la forma de pequeñas gotas).
En 2018, la cantidad de empresas registradas en la región de Coquimbo fue de 16.054. El Índice de Complejidad Económica (ECI) en el mismo año fue de 0,22, mientras que las actividades económicas con mayor índice de Ventaja Comparativa Revelada (RCA) fueron Extracción de Zinc y Plomo (62,09), Elaboración de Piscos e Industrias Pisqueras (61,65) y Cultivo de Uva destinada a Producción de Pisco y Aguardiente (50,77).[20]
En las últimas décadas, el turismo se ha convertido en unas de las actividades económicas más importantes, con variados centros. Entre ellos se encuentran tradicionales balnearios como Guanaqueros, Tongoy y las Termas de Socos, con otros de reciente creación como Las Tacas. El Valle de Elqui es muy famoso por ser un encantador lugar de turismo astronómico, cultural y de descanso.[cita requerida]
Destaca también en historia, Jorge Pinto Rodríguez, premio nacional de Historia en 2012.
Asimismo, Jorge Peña Hen fue el mayor representante de la música docta de la región, al ser el fundador del Conservatorio Regional y las Orquestas Juveniles de Chile.
Otro punto cultural importante de destacar en la Región de Coquimbo, es su culto religioso manifestado en sus fiestas religiosas, principalmente las de Andacollo y Sotaquí debido a la gran cantidad de personas que asisten. Estas fiestas se caracterizan por manifestar a través de la danza la devoción por la virgen, en el caso de Andacollo, y el Niño Dios, en el caso de Sotaquí. Estos bailes se caracterizan por ser una mezcla entre la antigua cultura diaguita y el culto cristiano católico introducido en Chile por los españoles en la época de la colonia.
Las actividades mineras y agrícolas explican la ubicación de las diversas localidades de la región, en torno a los valles transversales y yacimientos mineros. Originalmente se estructuró esta organización siguiendo la ubicación de los poblados indígenas diaguitas.
↑ abZapater Equioíz, Horacio (2011). «Los incas y la conquista de Chile»(PDF). Revista Historia (Pontificia Universidad Católica de Chile) (16): 251-252. Archivado desde el original el 3 de febrero de 2014. Consultado el 26 de abril de 2014.