El 9 de abril de 1714, fue bautizada con el nombre de su tía, Luisa Francisca de Borbón, conocida como Madame la Duquesa. Luisa Francisca fue muy apegada a sus padres, aunque éstos en realidad nunca estuvieron muy cerca. Luisa era la consentida de su madre y gozaba de constantes privilegios, Aparte gozaba de su título como Princesa de Sangre.
Vida posterior y Matrimonio
En 1718, durante la regencia del duque Felipe II de Orleans, sus padres fueron encarcelados; su padre fue enviado a Doullens y su madre a Dijon. Ella fue trasladada de la abadía de Maubuisson a otro convento de Chaillot en París, alrededor de la actual zona del Trocadero. Permaneció en Chaillot hasta 1720, cuando sus padres fueron liberados de sus encarcelamientos separados.
Se dice que mademoiselle de Maine fue prometida a un señor de Guisa, pero dicho compromiso nunca se materializó.
Su matrimonio fue con el príncipe viudo Jaime de Mónaco, que a menudo residía en el Palacio de Versalles, Su madre acordó este matrimonio. Jaime era viudo, pero aceptó después de ser atraído por una gran Dote y por la necesidad de una princesa en el principado de Mónaco.
El matrimonio no fue unido, pero si cumplieron con los deberes maritales como deberes de una Princesa soberana de Mónaco
Princesa Soberana de Mónaco
Luisa venia de una poderosa familia con numeroso títulos y principados. Tuvo la educación de una Princesa de sangre. Sin embargo, ella no tuvo la educación de como Gobernar al ser una Princesa Soberana.
La agenda de una princesa soberana es muy ocupada ya que Luisa tenía representar al principado en eventos oficiales, participar en actividades benéficas y humanitarias, apoyar la cultura y las artes. y representar a la familia real. Luisa fue acostumbrándose al ambiente de una soberana y aunque no tenía nada de enseñanza sobre ello recibió guía de su marido como de la familia real
Luisa fue Princesa soberana por 2 años hasta la abdicación de su marido a favor de su hijo Honorato III de Mónaco en el cual cambio su título a Princesa de Mónaco.
Descendencia
Aunque el principado de Mónaco ya tenía heredero la pareja tuvo cinco hijos en el que solo cuatro llegaron a la edad adulta.
Jaime I fue unido a sus hijos y estuvo presente en su educación al igual que su madre fue presente en la educación de sus hijas.
Luisa fue igual a su madre y ella fue unida a todos sus hijos y los mimaba. La madre de Luisa. La duquesa amaba a sus nietos y los mimaba cuando los veía. Luisa se encargó de la educación típica de un príncipe y llevarlos constantemente de visita con su familia o al Palacio de Versalles.
Fue enterrada en la capilla del Castillo de Anet. Su tumba fue respetada por los revolucionarios de 1789-1799. Ella fue sobrevivida por sus dos hermanos mayores y su madre.
Ascendencia
Árbol genealógico de Luisa Francisca de Borbón-Maine